Vengo con mi análisis del Samsung Galaxy S6 Edge, el nuevo buque insigia de la compañía que decidió dar un salto de calidad para que su línea Galaxy S no se vuelva aburrida.
Este smartphone viene con mejoras en todas partes, un procesador tremendo, retoques en la pantalla y también en la cámara. Si bien la compañía no logró crear un efecto sorpresa en los últimos modelos, con éste sí podemos decir que lo ha hecho, y mucho más.
¿Qué es el Samsung Galaxy S6 Edge?
Es el nuevo terminal que la compañía tiene como principal, al que le han otorgado la corona por así decirlo. Y eso significa mucho, especialmente para una empresa como Samsung.
Entre las características se destacan su pantalla de 5,1 pulgadas con una impresionante resolución de 2560×1440 en un panel AMOLED. La densidad conseguida por pulgada es de 577 píxeles. De hecho, si estás leyendo este análisis desde una computadora, es muy probable que tu pantalla tenga menos resolución que la del Galaxy S6 Edge.
Bajo esa descomunal pantalla (no por su tamaño sino por su resolución), funciona un procesador Exynos 7420 fabricado por la propia empresa. Puede parecer sólo un detalle, pero no es poco prescindir de Qualcomm para apostar por un producto fabricado al 100% por ellos. Su cámara tiene 16 megapíxeles, la batería 2550 mAh (menos que la del S5) y se recarga de manera inalámbrica sin utilizar una funda.
Algo que generó bastante controversia pero se lo puede ver como una innovación interesante es que prescinde de ranura para tarjeta microSD. Así que el espacio que viene de serie es el que tendrás por siempre, con espacio de almacenamiento en la nube aparte.
¿Por qué vale la pena?
El Galaxy S6 vale la pena por todo lo que tiene. Desde que comenzó la historia de los Galaxy S6, la compañía ha mostrado no sólo los mejores móviles que puede hacer, sino también los mejores móviles Android que pueden ser comprados. Pero esta vez han apostado por algo distinto.
Lo que diferencia a este modelo de otros es que, en los anteriores, Samsung intentaba distinguirlos con tremendas prestaciones técnicas, con nuevas tecnologías que otros teléfonos no tenían. Y en este caso eso sigue presente, pero teniendo cuidado en las formas: con materiales, diseño, apariencia y tacto increíbles. Es de verdad un teléfono de altísima gama.
Lo mejor del Samsung Galaxy S6 Edge
-
Su diseño futurista
El diseño que ha conseguido Samsung con este smartphone es seguro lo que han esperado lograr desde hace años y que venían maquillando dentro de todo bastante bien, y que probablemente se convierta en la base de los diseños a futuro. Con bordes de aluminio, una parte trasera cubierta por un delicado cristal construido en colaboración con Gorilla Glass 4 y un peso insignificante, agarrar el teléfono se siente hermoso.
Todo este hermoso y compacto diseño es gracias a que ya no está la ranura para microSD y a que cambiaron la batería. Ese es el precio que la compañía ha tenido que pagar pero la verdad es que vale la pena.
Pero, lo que de verdad termina dándole el estilo son sus bordes curvados. Descienden del Galaxy Note Edge, aunque siendo un poco menos acentuados y están presentes en ambos lados del smartphone. Si bien no son super útiles al tacto, ofrecen un apartado estético sensacional, parece un teléfono sacado de una película de ciencia ficción.
-
Modo de carga ultrarrápida
Esto me ha parecido muy interesante y es que, a pesar de tener una batería conservadora como casi todos los modelos de alta gama que llega a 24 horas de uso normal, tiene un modo que promete hasta 4 horas de uso con estar conectado sólo 10 minutos a la corriente.
Además, ofrece una carga inalámbrica sin necesitar de mayor grosor o de una funda incómoda. Eso sí, no funciona en todos lados.
-
Excelente funcionamiento
Aquí entra su sensacional procesador que optimiza la velocidad y fluidez del teléfono para que funcione con consistencia. Esto quiere decir que no tiene bajas, que siempre anda bien, no se traba en ocasiones. Es un detalle que hace que día a día quieras más al teléfono, porque al fin y al cabo uno tiene que convivir siempre con él.
Y para colmo, el sensor de huellas dactilares funciona como se debe por primera vez. Aquí no hay que deslizar el dedo sobre él, solo hay que dejar el dedo reposar. Si bien no es tan bueno como el del iPhone, funciona como se debe que es lo que importa.
Con respecto a la impresionante pantalla, no hago mención aparte porque su resolución es tan alta que ni te das cuenta, es decir, casi que excede el tamaño de la pantalla. Lo bueno es que siempre verás todo en la mejor resolución.
-
Una cámara única
La cámara del Galaxy S6 es hoy en día la mejor entre los smartphones que hay en el mercado. No hay otra compañía que la supere en ese aspecto, ni Apple con su iPhone 6. Además, se usa con el doble pulso, que hace que sea muy rápido su uso.
Lo malo del Samsung Galaxy S6 Edge
Su batería
Ya sé, dije que el modo de carga ultrarrápida es muy bueno, pero eso no quita que con todos los avances que han hecho no puedan elaborar una batería que dure más de 24 horas. Es eso que tienen pendiente Samsung y otras compañías, pero más allá de esto, no hay otros puntos negativos de mi parte.
¿Qué te ha parecido el análisis del Samsung Galaxy S6 Edge? Aclaro que es el modelo Edge, no el Galaxy S6, son modelos distintos, con precios distintos y algunas especificaciones diferentes. Si has probado el teléfono deja tus impresiones en los comentarios, y si quieres comprarlo y tienes dudas también déjalas por aquí o por Twitter (@AyalaManu).
Agradezco a los muchachos de Gizmodo, de donde tomé las imágenes.