Lo dije antes y lo volveré a afirmar: quien no conoce Monopoly, no conoce ningún juego de mesa. ¡Si me habré peleado con mi hermano (o mejor dicho, con los dados) por ver quien era el primero en comprar Paseo Tablado (en mi versión, era la propiedad mas cara de todas) u obtener todos los trenes.
Siempre supuse que siendo estadounidense, jugar significaría otra cosa. Las calles y las avenidas serían, quizás, más «propias». ¡Es probable que hasta vivan en alguna de ellas! Pero ahora, con esta versión geek de Monopoly podremos sentir mas a gusto con su «geografía». Y sino, miren las imágenes!